lunes, 14 de abril de 2008

Reflexión republicana

Hoy es el día en el que se conmemora el aniversario de la Segunda República Española. Fue proclamada en este país (Sí, en este; en España) el 14 de abril de 1931. En 1936 hubo un golpe de estado que intentó derrocar al gobierno elegido por sufragio universal. Sólo consiguió derrocarlo provocando una guerra civil que trajo una dictadura de las más crueles que se recuerdan en Europa y que duró casi 40 años, hasta 1975. El resto, más o menos ya lo conocéis.
El espíritu republicano (ser democrático en 1931 era por sí solo un triunfo. Si no, que se lo pregunten a la malograda República de Weimar) debía ser muy fuerte en este país, teniendo en cuenta el empeño que Franco puso en la represión posterior hasta eliminar el último vestigio (no exiliado) político, cultural, artístico y educacional republicano (El dictador Franco, eliminó físicamente al 90% de los maestros de escuela de este país. Sabía muy bien que ese era el caldo de cultivo ideológico de la República: gente culta y con ganas de enseñar cultura). Para hacer más suave esta labor, firmó el último parte de guerra en 1941 (dos años después de haber acabado la guerra oficialmente), así podía ejecutar con juicios sumarísimos a quien quisiera argumentando que aún se estaba en tiempos de guerra. Schnell und sauber, como dirían los alemanes (Franco tuvo durante años 4 campos de concentración en España y para españoles. Esto no lo hizo ni Hitler).
Así, no debemos extrañarnos de que la educación en este país fuera regida por curas (y sus santas e incuestionables escrituras) durante toda la dictadura. Eso marca y mucho. Ha marcado nuestra manera de ver el arte, la literatura, el cine, el sexo (Por ejemplo, mi padre creyó hasta los 18 años que si tocaba físicamente a una chica, la dejaría embarazada. Creía esto en 1968, mientras París ardía en un mayo de barricadas libertarias), las relaciones familiares, el concepto de poder, y millones de dolorosos etcéteras.
No nos puede extrañar, pues, que hoy en día este país adolezca de faltas graves en cultura general y no hablo de ir al colegio o a la universidad. Hablo de hábitos más profundos que el mero hecho de asistir a clase y aprobar un par de exámenes. Hablo de la pérdida de la afición a la música clásica, a la poesía, a la danza y a otras muchas artes sutiles que fueron denostadas y desterradas por el régimen franquista.
La Segunda República Española no era el colmo de todas las virtudes pero alcanzó niveles democráticos y culturales que incluso hoy día se consideran auténticos logros sociales. De hecho, muchas de sus conquistas se desvelan hoy proféticas en el actual marco de la Unión Europea. Promulgó el sufragio universal, dio el derecho a voto a la mujer, abrió las vías necesarias para la reforma agraria basada en un régimen cooperativista, instauró una España plurilingüe y federal, se declaró pacifista por principios, decretó una educación pública y gratuita (basada en las modernas enseñanzas de la Institución Libre de Enseñanza), garantizó la aconfesionalidad del Estado y el laicismo de la vida pública, etc. etc. etc. Obvio decir que es todo lo contrario a lo que hizo el dictador durante toda su vida (que fue la de un país entero).
Yo viajo mucho por el extranjero (Todo lo que puedo) y me he dado cuenta de ciertas realidades: Cuando estoy fuera de España, mi bandera es rojigualda y hablo español. Cuando estoy dentro de España, mi bandera es la tricolor y hablo castellano. Posiblemente esto me ... (continuará)
Lo siento! Es que ando con mucho trabajo!

martes, 1 de abril de 2008

NUEVO CORTOMETRAJE

Hace tres semanas acabamos la producción de mi último cortometraje. Lo hemos rodado en Madrid en las instalaciones de la ECH. Se va a titular PARTES HUECAS. Ya os pondré en aviso para todo aquel que quiera ir al "estreno". Me imagino que estará montada antes de que acabe el mes de abril. Quiero agradecer la colaboración desinteresada de todos aquellos que me han ayudado en el proyecto de un modo u otro. Todos sabemos lo difícil que es producir un filme por pequeño que sea y más sin presupuesto alguno. De verdad, gracias.