jueves, 9 de febrero de 2017

LLÁMALO RÍO

No lo llames muerte,
llámalo río que enerva
las leyes hasta el infinito.

Sujeta el aliento entre
algodones hasta
que salga frío.

Déjate llevar. Vente conmigo.
No lo llames angustia.
Tampoco olvido.

Acaricia la sombra.
Desnúdala.
Y sueña conmigo.

No luches más contra el destino.
Una lágrima larga,
un recuerdo, un abrazo, un amigo.