Quítame los trapos y abraza la piel.
Desnúdame y mira
atentamente, dime qué ves.
Si soy sol, amigo, hambre o pena.
Que con banderas huecas
tapando el amanecer
no hay quien se entienda.
Paño de raso, colores de hiel,
dulce condena. Si no vas
a luchar ni a morir por ella
entonces ven. Este horizonte
no se admira solo y necesita
de hombres que lo quieran
sin más, amar, sin más.
Esta es mi bandera. Azul como tus ojos
y el mar, azul como el planeta.
Transparente y sin maldad.
Sin asta, ni pendón; sin treguas.
Sin enemigos con quien firmar la paz.
Sin resonancias, como tus banderas huecas.
domingo, 8 de octubre de 2017
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario