lunes, 29 de julio de 2019

ANIMAL PERDIDO

Habitar tu sonrisa como un animal
extinto que sabe que sus días están
contados; que después de ti
no habrá nada, solo un abismo

al que caer desde tus labios
a un horizonte perdido
para habitar otros páramos;
para seguir sobre lo mismo.

Tener un lugar donde mecer
la duda que la bruma acecha.
Torcer mi voluntad y aprender
de tu sonrisa, las ganas,

para seguir siendo yo mismo,
ser vivo y perdido entre pozos
obliterados, cercanos a mi sismo
donde alcanzar, si pudiere, el infinito.

miércoles, 10 de julio de 2019

MUJER NIÑA DIOSA

La voz encantada reúne todas cosas.
La niña, la mujer, la diosa.
La mirada sencilla que a todo ama.
Y el mundo arriba. Bien alto.

Mientras su sonrisa camina. La voz
despierta. Algunos días con rima.
Pensando solo en lo importante.
En lo importante que es la vida.

martes, 2 de julio de 2019

CANSANCIO

Y acaece Vésper para abrazarte con su manto.
Tornar las tapas de tus ojos, y si olvidarlo,
todo hasta mañana. Perdido en una maraña de barcos.

Que son un todo en el puerto, yaciendo sonrojados.
Tumbados, oscos, calmos, cierzos, rezagados.
Mientras el vaivén crepuscular olvida el desengaño.

Y todo no es más que un mar en un espejo empañado.
Donde las almas se cruzan casi sin rozar, de soslayo.
El cansancio te mece, te vence, te deja flotar horadado.

AMBOS

Serás mi Niké, Mi penetrante diosa alada.
Un hervidero de vida reposando
en un pedernal de chispas hambrientas.

Serás mi Psiké, aun incontrolada y furiosa.
Que mueva mi mano por el papel. Cautive
historias y aristas; baile bien. Corifea.

Serás mi Efialté, negro demonio de mis pesadillas.
Que hurgará mi cabeza de soslayo
mientras sucede la vida entera.

Seré tu Daimon. Pobre y triste. Invencible.
Eterno, improvisto. Desearé que juegues,
mientras te pueda disfrutar a mi lado.

Serenos seremos en una luz de candelas.
Apoyados en la jamba. Callados.
Cerrados en un abrazo. Abiertas las venas, ambos.

CONMIGO

Quédate conmigo si no te importa
caer del lado de los perdedores.
De los que olvidan la historia.
Los que se educan con sus enemigos
adoran como tantos, sus cadenas.

Quédate y juntos romperemos el muro.
Minuto a minuto, con nuestra paciencia.
Partir la luz en mis colores, deshacer el mundo.
Déjate engañar por mis verdades, atrévete
a pensar y a soñar desnuda, con tu mente al aire.

Quédate y abandona tu casa caliente.
Configura un relato nuevo, alejado de pestes.
Aunque nos odien, aunque nos peguen.
Seremos locos por buscar a quien amar.
Seremos tratados como extraterrestres.

PERSONA

Eres persona como tantas otras; como cientas.
Solo poso de agriedad dejas. En todo lo que tocas.
No eres misterio ni pan. Eres regla.

Tampoco humana pues, como persona, naciste muerta.
Eres un intento bobo de obviedad. Una falta de respeto
constante a mi inteligencia. Persona como teselas.

Que conforma un cielo de azur
que sirve de fondo al mar
en un océano vacío que no pesa.

ESFERA

Me imagino cómo será la parte
de atrás de tu mirada. Qué desvelos
esconde; qué ansias. Qué desventajas claras
que pueda abrazar, ensoñar, privatizar
mientras me hablas.

Imagino las noches, los días. La mente
que se aproxima y declama. La piel que no se toca.
La avaricia, la envidia. La realidad que se pliega
a tus deseos. A mis enredaderas. Tiemblas; espero.
Deseas y no entro.

Imagino los misterios que se abren como una rosa.
Frescos por la mañana; envueltos entre telas.
Honestos en la oscuridad, donde nadie llega.
Donde está prohibido soñar. Donde nada espera.
Encerrado, flotando, en una esfera.

miércoles, 1 de mayo de 2019

A MI EDAD

A mi edad, ya solo tengo preguntas.
Ni razón ni sentido: huesos dorados;
huecos horadados que albergan
un otro yo cautivo.

A mi edad muere el talento.
Perece pobre y aburrido.
Sediento de mar. Descabalgado
y preso del hastío.

A mi edad ya no me persiguen sirenas.
Su canto es moneda lanzada al viento
para ver quién la recoge al vuelo y la abraza
fuerte, sin miedo al vacío.

A mi edad no redoblan las campanas
ni por albricias ni por ecos ensoñados.
Solo la brisa fina levanta el fino polvo
que seré yo, a mi edad, testigo.

martes, 23 de abril de 2019

SOY O NO SER

No soy historia, aun cargando
con el peso de todos vosotros.
No soy poeta y, sin embargo, escribo
las mieles más finas y suaves.
No soy maestro y enseño, aprendo,
muestro, confecciono.
No soy efebo, pero siento el Olimpo
cerca; a mis puertas.

Soy amante. De abrazo continuo. Nacido
para admirar todas las cosas.
Soy relator de nuestro consumo,
nuestras beldades, nuestras formas.
Soy humano renco que estira el cuello
para poder respirar entre tantas personas.
Soy o no; soy por no ser, perdido hoy.
Quizás mañana seré verdad, siendo yo mismo.

domingo, 21 de abril de 2019

CORAZÓN SOBERANO

No lo llames,
no lo nombres,
no lo nomencles.
Ignora la sociedad.

Deja que se pudra
de envidia y soledad.
Deja que sufra
pues no te puede controlar.

Ya nada inunda.
Ni tu llanto ni tu alcoba.
Ni el corazón soberano
que late por sus propios pasos.

Yerra maldita y moribunda.
Impotente y vanidosa;
Sabrosa como la primera caricia.
Pero libre, sin deudas y ligera.

Equivócate pero sin pena.
Háblame toda la verdad.
Hazme tu compañera.
Abrazaos por siempre.
Escapad de la condena.

PEGADO A TU PECHO

Pegado a tu pecho eres
una diosa de floridas religiones.
Se detiene el tiempo y solo
tu palpitar existe
en este océano de dudas.
Marasmo de imprecisiones.

Cosido a tu pecho descanso, goteo
en mí energía, vuelvo a la vida.
Y se me olvida que todo es sueño,
que todo es mentira.

Pegado a tu verdad, eres
la única reliquia.
Tu calor es mi religión.
Tu piel, mi iglesia de culto.
Abandono mi cuerpo;
las enfermedades.

Pegado a tu Ser encuentro
el todo, el porqué,
el espacio donde volver,
cuando el oxígeno me da calambre.

miércoles, 10 de abril de 2019

GRISALLA


Pobre con puños de grisalla.
Canela, clavo, sudor y lágrimas.
Batalla perdida, desconsolada.
Pobre, con codos sucios
y olor a manta.

Pobre sin confianza en el mañana.
Cada mañana, una y otra,
enterrado entre las ganas.
Pobre con luces lacias
y cuentas falsas.

Pobre y numerado, corto.
Corte mitad en la juventud.
Todo ahora parado.
Pobre por confusión.
Perdido, ajado y desolado.

COBALTO


Cobalto en la piel y seiscientas
noventa razones para naufragar. Salir
volando por las azoteas
entre dos mundos. Uno

que casi no está y otro
que todavía no comprendo.
Silente, como la furia del mar
cuando nadie se presta a escuchar.

Furiosa como emperatriz de cristal
que comanda ejércitos de arena
entre dos inteligencias: Una
fabricada con sal y otra
esperando a ser devuelta.

GIGANTE


Necesito un gigante que me arrulle;
Me levante liviano y en sus cuencas
me tenga para dormir allí por siempre.

Como si fuera tierra. Tierna. Tierra.

Elevada en sus manos, el gigante
gigantea por las mañanas, por las noches.

Seguro de no desfallecer. De seguir constante.

Necesito una torre, un abismo, una piedra.
Un gigante que me arrulle, por ser yo, cobarde.